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Nuevos sistemas de facturación

Durante los últimos años, las soluciones en la nube han pasado a integrarse completamente en nuestras vidas.

Cada vez son menos los datos que guardamos en nuestro disco duro local, siendo este método sustituido por el guardado en la nube, que nos permite acceder a cualquier contenido en cualquier momento y desde cualquier dispositivo.

Al igual que con el guardado de datos, lo mismo sucede con las soluciones de software. Ya casi no se instalan programas en los ordenadores, sino que se accede a ellos online a través de la nube.

Las soluciones cloud (soluciones en la nube) han llegado para quedarse, facilitando el día a día de los usuarios y centralizando la información para hacer más fácil colaborar y trabajar en entornos empresariales.

A continuación, analizamos las soluciones más demandadas que la nube nos ofrece para entornos empresariales.

Los ERP en la nube

Un ERP (Enterprise Resource Planning) en la nube, también conocido como ERP cloud, es una solución de software que se encuentra alojada en servidores remotos y accesible a través de internet.

Este tipo de sistema está diseñado para ayudar a las empresas a gestionar eficazmente sus recursos y procesos, integrando una amplia gama de funciones en un solo sistema centralizado.

La principal ventaja de un ERP cloud radica en su capacidad para proporcionar a las empresas una plataforma flexible y escalable que puede adaptarse a las necesidades cambiantes del negocio.

Este tipo de solución permite a las empresas acceder a sus datos y aplicaciones desde cualquier lugar con una conexión a internet, lo que facilita la colaboración entre equipos en diferentes ubicaciones y mejora la eficiencia operativa.

Además, al estar basado en la nube, las actualizaciones y el mantenimiento del sistema son gestionados por el proveedor del ERP, lo que reduce la carga de trabajo de TI para las organizaciones.

Tipos de ERP

Existen muchos tipos de ERP, algunos ofrecen soluciones específicas y otros engloban todas las funcionalidades anteriores y muchas más.

Ya sea según la necesidad o la tecnología, los ERP se pueden clasificar en

  • ERP Horizontal
  • ERP Vertical
  • ERP Estándar
  • ERP Personalizado

El ERP Horizontal se destaca por su facilidad de uso y rápida implementación, lo que resulta en ahorros de costes inmediatos, además de ofrecer personalización para abordar necesidades específicas.

En contraste, el ERP Vertical se adapta mejor a sectores específicos, aprovechando décadas de experiencia en el sector, aunque a veces puede tener mayor coste y mantenimiento.

Los ERP Estándar son adecuados para empresas sin particularidades de gestión, brindando innovación y reducción de costes, pero pueden requerir adaptar sus procesos al sistema, siendo estos menos flexibles.

Por último, los ERP Personalizados se diseñan para satisfacer las necesidades precisas de una empresa, aunque su implementación puede ser costosa y menos ágil.

¿Qué soluciones nos aporta un ERP?

Algunas de las funciones clave que un ERP cloud puede llevar a cabo son la gestión de finanzas, contabilidad, inventario, compras, recursos humanos, producción, ventas y distribución, entre otras.

  • Inventario: La gestión de inventario es eficiente y precisa, ofreciendo también un seguimiento en tiempo real de productos y materiales.
  • Compras: Facilita la gestión de proveedores, órdenes de compra y contratos.
  • Finanzas y Contabilidad: El ERP automatiza el seguimiento de transacciones financieras, simplificando la gestión de cuentas, informes fiscales y presupuestos, y proporcionando una visión en tiempo real de la situación financiera.
    Además, los sistemas ERP más avanzados, también se ocupan del cumplimiento de la normativa de cada país, como por ejemplo el sistema verifactu, una nueva medida del Gobierno de España englobado en la Ley Antifraude.
  • Recursos Humanos: Automatiza procesos de recursos humanos, como la nómina, las contrataciones, despidos, o la asistencia. Simplifica la administración de personal y garantiza el cumplimiento de la normativa.
  • Producción: Optimiza la planificación de producción, la gestión de calidad y el seguimiento de procesos.
  • Ventas: La gestión de ventas y el seguimiento de clientes se vuelven más eficientes, lo que impulsa la productividad de los equipos de ventas.
  • Distribución: Permite una gestión más precisa de la cadena de suministro y la distribución, mejorando la entrega de productos a los clientes.